Planning
Mujer con vestido corto de novia hincada en una cama con una pizza a un costado.
Mujer con bata blanca de novia, sosteniendo una copa con la mano y un cigarro en la otra.

¿Necesitas tener damas de honor para tu boda?

Por: Memo Poblete

Las damas de honor pueden ser un gran squad o un motivo de estrés. Te ayudamos a resolverlo.

Cuando planificas una boda, elegir una dama (o damas) de honor es todo un reto. Si estás teniendo dificultades para decidir, no quieres causar drama o simplemente no es lo tuyo, hay varias alternativas que puedes considerar.

La función de las damas de honor ha ido evolucionado con el paso del tiempo. Tradicionalmente, este rol incluye planificar la despedida de soltera, la fiesta de compromiso y dar apoyo a la novia, pero estas tareas pueden ser delegadas a amigos cercanos, familiares o a la wedding planner, si es que decides no tener una específica.

En primer lugar, es perfectamente válido elegir a más de una persona para estos roles, especialmente si te resulta complicado tomar una decisión y esto te genera incertidumbre. Así distribuyes las responsabilidades y reduces el estrés para todos los involucrados.

Una alternativa es no seleccionar a una dama de honor específica, permitiendo que todo el cortejo nupcial comparta las responsabilidades. Esta opción ayuda a evitar el dilema de elegir a una sola persona y asegurará que todos se sientan valorados por igual.

Otra posibilidad es prescindir completamente del cortejo nupcial. Esta decisión puede prevenir cualquier sentimiento herido entre amigos y simplifica significativamente el proceso de planificación, especialmente para la novia. De esta manera, los amigos asistirían a la boda como invitados, disfrutando plenamente del evento sin las obligaciones y el tiempo que conllevaría ser parte.

Consejos si decides no tener una dama de honor

Designa un apoyo moral
Piensa en una amiga o familiar con quien puedas hablar de las cargas de planificar una boda y mantener tu paz mental durante todo el proceso, en especial el día de la boda.

Pide asistencia el día de la boda
Hazlo con un amigo cercano o familiar (puede ser tu mamá) con los pequeños detalles personales de los que necesitas encargarte el día de la boda.

Solicita apoyo durante la ceremonia
Elige a alguien para que te ayude con pequeños detalles durante la ceremonia, como arreglar la cola del vestido o sostener el ramo.

No hay una regla estricta que diga que debes tener damas de honor, pero lo importante es elegir lo que funcione mejor para ti y te ayude a planificar la situación de manera sencilla y agradable.