Bodas íntimas, lo de hoy
Por: Team Bridetique
Toma un respiro e imagina la belleza y la intimidad de una boda más pequeña. Sí, ¡también nos encanta!
Estamos en una época en donde todo el mundo busca mostrar en redes eventos gigantes y lujosos, pero las bodas íntimas tienen un gran encanto que también robará suspiros cuando compartas las imágenes.
Descubriendo la belleza de las bodas íntimas
Cuando se trata del día en el que llegarás al altar, existe una presión de que todo tiene que verse y sentirse lujoso. Sin embargo, en los últimos meses ha habido una tendencia hacia las bodas pequeñas o el famoso “lujo silencioso”, que ofrecen muchas ventajas deberías considerar.
Conexiones significativas
Uno de los beneficios más importantes de una boda pequeña e íntima es la oportunidad de establecer conexiones significativas con los invitados, en vez de sentirse abrumados por una multitud. Al limitar la lista a familiares y amigos cercanos, se garantiza la presencia de quienes realmente importan. Este ambiente más íntimo facilita interacciones auténticas y conversaciones sinceras.
Reducción del estrés
Una celebración grande siempre causará más estrés, desde la logística, los asientos para los invitados, etcétera. En cambio, una pequeñas se caracteriza por su sencillez a la hora de planificar. Así, la logística de movimientos para cada persona también será más fácil, en el menú podrás ofrecer más variedad de comida y nadie se sentirá olvidado o desplazado.
Atención al detalle
Con menos invitados, podrán enfocarse más en diferentes aspectos de su boda, como un menú más personalizado, cócteles y detalles donde luzca más el reflejo de su amor.
Libertad
Optar por una boda más íntima puede ofrecerte mayor flexibilidad y libertad. Desde seleccionar un restaurante acogedor hasta contar con una lista de invitados que permite ajustarse fácilmente a cambios de última hora. Además, al manejar un presupuesto más reducido, tienes la posibilidad de destinar tus recursos a lo que realmente te importa, como una magnífica sesión de fotografía o una luna de miel de ensueño.